Confesiones V parte - La primera noche juntos

Los días pasaban y cada momento q pasábamos juntos era para darnos cuenta que estábamos hechos el uno para el otro. Tan solo recordarlo me trae un gigantesco nudo en el estomago…. Las noches juntos eran largas y no nos cansábamos el uno del otro. Podíamos pasar hora y horas hablando de cualquier cosa, besándonos como si el mundo se hubiera detenido para deleitarse con el amor que emanábamos. Los de afuera se volvieron de palo. Todos sabían y quienes no estaban de acuerdo con lo nuestro dejaron de existir. Las palabras de a poco se hicieron silencios eternos que duraban a penas unos segundos. El tiempo se volvió algo para guardar en el bolsillo. No alcanzaba jamás para disfrutarnos lo suficiente. Nada era suficiente.
Una noche, no recuerdo exactamente la fecha, salimos. Todos. Los chicos de la banda y unos amigos mas, los Posse (que luego tomaran mas importancia) y Gabriel, mi mejor amigo. Destino: As de Basto, un pub. Y ahí estábamos, frente a todos como si no nos importara que nos vieran juntos. Bailábamos, nos reíamos, nos besábamos. El estaba un poco pasado de copas. Yo le rendía tributo a la sobriedad, aunque ni bien salimos parecíamos cualquier cosa menos sobrios.
Cuando la noche termino, salimos de la mano, sin problema de que alguien nos viera. Había pasado tan poco tiempo de mi ruptura con Sebastián que debería haberme cuidado un poco mas. Pero bueno, en ese momento no importo y nos dejamos ver juntos como si nada. En la puerta le di un beso. Uno de esos que humillan a la soledad, y lo invite a que fuera a dormir conmigo. Obviamente accedió sin ningún problema.
Cuando llegamos a la casa de mi amiga, fuimos a acostarnos. El se sentía mal por la borrachera y yo trate de calmarlo con masajes, pero me canse rápido. Así que nos acostamos abrazados y dejamos que pasara el tiempo. Creo que fue la noche mas hermosa de toda mi vida. Quería morirme, pero literalmente, sentía que no me importaba nada mas en todo el mundo. Lo único que quería era estar con el. Creo que de verdad fue ahí cuando sentí el mas profundo, verdadero y puro amor. Era la primera vez que dormía abrazada de un hombre, y era el, nadie mas que el… Se durmió, como si nada. Me abrazó y se durmió. Yo me quede observándolo toda la noche. No quería perderme ni un segundo de sus sueños, de sus expresiones mientras dormía. No quería perderme de nada, y no me dormí. Y me sentí desfallecer cuando sonó el despertador. Los dos teníamos que ir a trabajar al día siguiente. Pero nos quedamos en la cama, acostados y abrazados lo mas que pudimos, incluso llegamos tarde, cada uno a su ocupación.
El día siguiente fue como caminar por una nube. Me colgaba con cualquier cosa, en cualquier momento. Solo tenia cabeza para pensar en el.
Ahora me pongo a pensar en lo terrible de todo esto. Mi mundo se había reducido a el, solo a el. Y en ese momento no me di cuenta de que eso, después iba a tener terribles consecuencias en mi.
Pero lo mágico, lo increíble de esa noche es algo que esta grabado en mi memoria, y que, aparentemente, se va quedar ahí para siempre.